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{{'2019-10-19T03:17:00.000Z' | moment 'DD/MM/YY HH:mm'}} /#/ 242785

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Indeed. Si esta muerto, pues, nada se puede hacer (Hay una mascara que revive cadáveres. Pero es mas necromancia que otra cosa kek). Y lo mismo sucede con daños extremos o muy brutales como lo puede ser daños cerebrales severos o al sistema nervioso (A lo mas podría reducir un poco el daño, pero seria tan ínfimo que prácticamente no habría diferencia).
>Balder

Aquella criatura finaliza de crear el resto de mascaras. Cometiendo errores entremedio los cuales terminan en trozos de cerámicas esparcidos en el piso. Debido a esto el conejo se sobresalto un poco pero al final respiró para poder relajarse.

Se percato de como el dueño de la tienda parecía caminar encima de los pedazos rotos. Y el joven enmascarado se preguntaba si le dolería o no. Mas al no poder notar alguna expresión de dolor o sangrado concluyo que no necesitaba ayuda alguna. Curar era por lo que vivía. Una forma de ayudar al resto para que puedan seguir normalmente con lo que hacían a diario sin ningún problema, simplemente era lo que le gustaba hacer.

"s-s-supongo que si....." Comento en voz baja. Respondiendo a la pregunta del ser del mas allá.

Su llegada parecía haber desconcertado a los de su alrededor. Cosa que le hacia sentir mal. Definitivamente su presencia no era requerida. ¿Por que lo habrán sacado si no se le necesita y solo era un estorbo?. El único deseo que tuvo en ese momento es que la tierra se lo tragase o cambiar de mascara para retirarse de ahí.... Pero, si la tortuga hace algo como eso, debía de tener un motivo.

"N-no es necesario.... s-se quien es..... nuestra nueva cuidadora..... ¿c-c-cleaire verdad?... u-un g-gusto conocerla" Habló intentando controlar el tartamudeo al notar que al menos ella parecía tratarlo con normalidad. Pero aun evitando su mirada

Aunque notaba como se encontraba preocupada por el por algún motivo. Algo que no debería de suceder o al menos le ponía incomodo que sucediera.

Pero no tenia tiempo para pensar en eso, puesto que un numero es mencionado. El cual relaciona de inmediato con las mascaras creadas. Junto a esto, la monja comienza a explicarle todo lo sucedido desde el día uno.

Si bien era una mascara nueva sabia de ciertas cosas. Ya tenia en claro el asunto con la criatura del mas allá y el manicomio, aunque solo era una pequeña idea de que era algo malo y ya. Los detalles no lo sabia. En cuanto a los días en la iglesia, solo sabe que ahora vive ahí, todo lo demás esta completamente vació.

Pero, cuando comienza a hablar sobre el niño que había recaído en el hospital debido a un suceso inexplicable la actitud de balder cambia completamente. Se relaja, mira a su cuidadora directo a los ojos y escucha atentamente a cada uno de los detalles. Memorizando de forma inmediata todo lo que tenga que ver con aquel asunto.

Parecía... triste. Entre mas se extendía la explicación mas preocupación y pena se percibía en el conejo. Al menos, ahora mismo, se dirigían al lugar donde se encontraba el niño que necesitaba de su ayuda. No sin antes pagar las mascaras creadas por la criatura del mas allá.

Por parte de balder, primero se disculpo con la monja por hacerle gastar dinero y luego procedió a guardar el resto de las mascaras pensando en para que quiere tantas la tortuga.

Ya luego de eso se entera de que tendrá que esperar horas antes de poder ver al afectado. Por ende, solo le tocaba aguantar y dejar al tiempo fluir...

...

Fueron unas interminables horas. Demasiado largas para el conejo quien solo quería ver a aquel niño cuanto antes. Casi parecía que el tiempo pasaba mas lento o no avanzaba en absoluto.

En ese rato solo se dedico a juntar las manos como si estuviera rezando, aunque en realidad solo lo hizo por los nervios, puesto que la mente la tenia completamente vacía en un intento de distraerse. Pensó que tal vez si hacia eso todo transcurriría mas rápido

No comió, no hablo, no hizo prácticamente nada en su espera. De forma simple, estaba mas preocupado por la salud de aquel niño que por lo que sea que le pasaría a el.

Por suerte su espera termino. Y, de forma inmediata, puesto que es alguien impaciente, se dirigió al hospital para poder ver al pequeño.

Una vez ahí entra a su habitación con miedo de lo que se pudiera encontrar. Por mucho que se prepare o ese se su trabajo no significa que le gusta ver a la gente herida. Incluso, uno de sus sueños mas profundos e imposibles de alcanzar, es que ya no sea necesitado nunca mas en la vida. Pero no tenia tiempo para distraerse con fantasías, había algo mucho mas importante de lo cual hacerse cargo.

"p-pobresito.... N-no se lo merece" Dijo en voz alta. Mas que nada hablando consigo mismo con congoja mientras se acercaba a la camilla donde estaba "P-pero ya estoy aquí y hare algo al respecto" Terminó de decir con un tono mas maternal.

Alzo las manos y las dejo a centímetros del pecho del niño hospitalizado. El conejo respiro un par de veces y cerro los ojos para concentrarse.

Fueron unos segundos donde no ocurrió nada, hasta que una estela verdosa comenzó a aparecer. Rodeando tanto a balder como al niño afectado por una enfermedad desconocida.

Las partículas verdosas se movían lentamente alrededor. Chocando unas con otras o solo siguiendo pacíficamente con su camino sin molestar a nadie de alrededor. Tenia cierto efecto relajante a la vista. Como si al mero contacto visual supieras que todo va a mejorar como por arte de magia.

Sus efectos fueron inmediatos. La fiebre bajo. El pulso y la respiración se estabilizaron. Cualquier herida se cerro de forma inmediata, cualquier cicatriz desapareció para no ser vista nunca mas. Todos los problemas físicos fueron arreglados. Devolviendole la salud por completo al afectado. O, incluso, mejorandosela.

El proceso duro un par de minutos. Una vez terminado el joven enmascarado dio un par de pasos hacia atrás y se llevo las manos al pecho. Esperando una reacción positiva por parte del pequeño hospitalizado.

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