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¿Hace cuantos sucedió esto? Ya que actualmente Danna tiene 20-21 años

>En la Academia Hakoniwa
La campana escolar resuena entre los pasillos y aulas, indica el comienzo del receso. Los jovenes estudiantes, embriagados con la energía dada por la primavera de la vida, se enfilan listos y dispuestos para aprovechar ese breve respiro de las actividades diarias. A veces, con ese bonito clima despejado típico de suburbio japones, dan ganas de relajarse y abstraerse con el paisaje, ya sea desde las aulas de clase, la azotea, o el patio, y simplemente ver... Como los delincuentes vuelan.

Para entender esa bandana de adolescentes con problemas de la ira que se elevan varios metros sobre el suelo, hay que retroceder un poco en el tiempo y moverse hasta el almacén trasero de la escuela. Un sitio donde antes se guardaban colchonetas u obstáculos para usar en gimnasia, pero ahora solo contienen problemas. Allí residen en hora de estudio los delincuentes más temidos de toda Hakoniwa, y quizás de todo el suburbio, pues cualquiera con dos dedos de frente se esconden al escuchar el coro de motocicletas acercándose y contaminando desde el horizonte, cruzando la carretera bajo la puesta de sol.

Pero ahora no hay ocasos ni escenas de postal, solo jóvenes siendo ociosos en su escondrijo. Juegan en las maquinitas de Pacman, Emperor of Fighters , o Dance Dance Revolution (Robadas del Arcade cercano); Se atragantan con litros de gaseosa y frituras (Robadas de la tienda de abarrotes cercana); Leen libros de mecánica, porque las motocicletas no se arreglan solas, excepto la de la jefa (Libros robados de la biblioteca también); o se pelean entre ellos para pasar el tiempo. Más un largo etcétera de actividades que pueden hacer un puñado de adolescentes con mucha testosterona en un almacén abandonado. La buena vida.

Motero novato: ¿Impartir justicia? ¿Por qué escribió eso...?

Motero calvo: Deja de hacer preguntas tontas y aprovecha.

Motero con gafas de sol: ¡Neesan, tu hermana cocina muy sabroso! Ojala lo hiciera más seguido.

Obviamente andan comiendo el Obento que Kaguya cocinó con tanto esmero y dedicación, ahora devorado por tipos bruscos que se deleitan con el sabor que solo la cocina del hogar puede conseguir. La persona a la que el último matón le dirijo la palabra, anda echada en un amplio sofá, a sombras del almacén. casi ni se le puede distinguir, pero es fácil vislumbrar su amplia envergadura, con músculos definidos y cuerpo alto. La criatura más fuerte de la Academia Hakoniwa, no responde, y permanece respirando con calma y silencio. Otro joven delincuente que anda resolviendo un Sudoku sentado en un mueble cercano, alza la mirada y le hace señas al matón de las gafas para que deje de insistir/molestar/andar de Damocles con la jefa.

Los minutos pasan sin contratiempos, pero entre los infames la calma no tienen mucho lugar, y uno de los matones que hace guardia en las puertas es empujado a través de estas con toda violencia, y cae al suelo. Los demás miembros de la banda dejan lo que hacían, alertas, y dirigen la mirada hacia la entrada.

Motero con peinado estilo Owen: ¡OE OE OE! ¡KUSOOOO!

Motero parecido a Dandy: ¡Otro ataque! ¡Joder, justo el día de mi cita con Michi-chan! (Es el tercer novio de Michiko)

Motero que resolvía el sudoku: Ara ara, ¿quien se atreve a molestarnos ahora?

Desde la puerta se puede ver a los retadores. Nudilleras en mano, agitando cadenas, zarandeando botellas rotas, bates y llaves inglesas inteligentes que dicen ¿Yes, sir? En pocas palabras andan bien equipados. Un grupo hostil y numeroso conformado por varios delincuentes de distintas escuelas que, una vez más, intentan dominar los suburbios. Pero para ello deben vencer al depredador más grande del acuario...

Les lidera un Bully Nivel 45 (Es como el Bully normal, pero más fuerte y abusón), joven heredero de una familia Yakuza de las que tantas hay. Avanza hasta quedar al frente de la legión de ladrones de dinero del almuerzo, pegadores de chicles, vagos, ladrones de bajo nivel, y extorsionadores de respuestas para los exámenes. Lleva ropas caras, muestra una sonrisa impoluta, y se peina el cabello, señales de clara confianza.

Bully Nv 45: Se dice que en esta escuela está la banda de matones más fuerte de la prefectura... Huhuhum, en este instante, comprobaremos lo equivocado que está ese rumor *Se peina*

Los moteros se enfrascan en esa escaramuza, en esa guerra sin cuartel donde los puñetazos van y vienen, las patadas vuelan, y más de uno grita por lo alto: ¡Meteoros de Pegasus!, ¡Oraoraoraora!, y, ¡¿NANI?! cuando se ven sorprendidos. Pero no importa lo fuerte que eran, ni cuantas técnicas usaran, la pelea fue uno de esos tristes casos donde la cantidad vence la calidad, como cuando un populista gana las elecciones presidenciales.

Motero novato: E-Estoy al limite...

Motero con peinado estilo Owen: No volví de América para sufrir esto...

Motero con gafas rotas: Bastardos...

Motero calvo: Esta no es mi forma f-final... *Se desploma inconsciente*

Hubo muchas bajas en la legión de criminales, pero al menos un cuarto de esta prevaleció. El joven Yakuza sonríe campante, triunfador, y entra al almacén como perro por su casa. se detiene al percibir la figura echada en el sofá.

Bully Nv 45: Tú debes ser... A ver si me acuerdo... *Se pone una mano en la frente si borrar su sonrisa burlona* ¡Danna! la supuesta Bestia de Hakoniwa y bla bla bla. ¿Qué pasa? ¿Por qué te escondes en las sombras cuando tu subordinados caen peleando? ¿Tienes miedo? Huhuhum, que decepcionante sería. Supongo que las historias sobre ti exageran. Aunque oí que eras guapa, ¿o eso también son mentiras? Si tu cara me convence y eres buena chica, podría ser comprensivo.

Como típico chico rico con poder y una bonita cara, las chicas le rodean y siguen como polillas hacia la luz. Está acostumbrado a vivir de fiesta en fiesta y tener a toda joven que desee, así que aspirar a conseguir una disque-fuerte matona no le resulta descabellado, de hecho le emociona la idea de domar a una mujer donde muchos fracasaron. Da un paso al frente con valentía, pero de un segundo a otro el joven yakuza se estremece por un espinazo de pánico, como si pisara vidrio, o activara el mecanismo de una trampa para osos. Queda congelado como una estatua. Tarda en notar dos brazas encendidas como puertas al infierno que le devuelven la mirada... Parpadea, sudando frío, y al volver en sí los puntos incandescentes desaparecen como un mero espejismo. Aun así, sabe y siente que ahora Danna le está observando.

Bully Nv 45: ¿Qué pasó...?

La delincuente entre las sombras tarda en responder, pero cuando lo hace, usa toda la tranquilidad del mundo.

"Interrumpiste mi sueño"

Bully Nv 45: ...

"Dañaste mi puerta. También golpeaste a mi gente"

Bully Nv 45: Así es. Ya no te queda nadie.

El abusón de alto nivel recupera un poco su compostura y se peina.

Bully Niv 45: Rinde te o-

Siente una presión en la cara. Seguido de un crujido. La habitación da vueltas. El techo oscuro se convierte en el cielo despejado, que tarda unos segundos en teñirse de rojo. Antes que el dolor le asalte, la inconsciencia se adelanta.

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