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{{'2019-05-14T09:02:00.000Z' | moment 'DD/MM/YY HH:mm'}} /#/ 146305

~~7 días, semanal master race para ya luego continuar con el sistema horario nuevo.~~
>>141067

Das un impotente pisotón en el suelo, que resuena fuertemente dejando eco debido a lo silenciosa que está esa calle. Sólo el viento arrastrado por el mar corresponde a tu llamado de batalla, como si sólo tú y nadie más recorriese, habitase o respirase el aire de ese pequeño sector del infame poblado. Aún así, tu instinto guerrero y la sed de batalla que comenzaba a fluir en ti tras semejante provocación hizo que por instinto, logres detectar casi automáticamente de donde venía al darte la vuelta, quizás por el silbido o simple experiencia... Entre tantas casas mal edificadas, unas de mayor altura que otras, logras con muchísima suerte, ver una silueta de una estatura menor a la tuya escabullirse detrás de una chimenea con agilidad, pero sin prisa. Sin embargo, lo que viste fue muy rápido como para confirmar si era "algo", o si específicamente, era "alguien". Todo sigue en silencio, aunque luego de tu grito puedes escuchar algunos cortos estruendos más, confirmándote que otros residentes estaban cerrando sus ventanas o puertas en algún lado.

>>141097

La ciudad es lo suficientemente pequeña como para encontrarlos rápidamente, más aún sabiendo que no irían a meterse en cualquier lugar rebuscado, ya que ambos caminaron en línea recta hacia la zona central y más poblada de la ciudad. Mientras caminas, como curandera puedes sentir la casi nula sensación de vida que este lugar emana, sin animales volando alrededor, con su vegetación marchita y sus casas azotadas por ~~Dios~~ el pasar del tiempo sin recibir un buen mantenimiento. Todas las ventanas están cerradas. Sin ir más lejos, llegas a discernir la vistosa armadura de Ornstein, junto a otras tres personas. ¿Serán compañeros? ¿Se habrá metido en una pelea?

>>141091
>>141072

El lugar se va sintiendo muy vacío, cada vez más por cada paso que dan. A medida que avanzan, la calle parece volverse más angosta al comenzar a volverse un pequeño callejón, rodeado por diversas casas en un mucho mejor estado, edificaciones pequeñas pero de gran altura, bien formadas y con unos colores bastante presentes, a pesar de ser apagados. Algunas de esas, tenían carteles o pinturas pequeñas al lado de sus puertas, indicando que algún tipo de actividad específica se realizaba dentro de sus muros, como también podía ser algún tipo particular de tienda. Todas las ventanas estaban rejadas. Se escuchan unos pasos por lo algo, pero no es realmente nada. El castillo comienza a dibujarse a lo lejos

3 turnos hasta llegar al castillo (uno más por ir a pie)

>>141074
>>141078

Ambos sujetos siguen parados ahí observando como dialogan ustedes dos, mientras entre ellos, hacen lo mismo para luego volver a colocar sus ojos en ustedes y reírse de manera fría. Uno de ellos, al ver como Shusse intenta desenfundar su arma, observa a su compañero haciendo un movimiento tranquilo con la cabeza señalándole el callejón de atrás, como si le estuviese ofreciendo irse hacia otro lado, pero éste sólo responde mostrándole la palma de su mano en un movimiento fugaz y breve. Al oír el grito del Matadragones a la distancia, dirigiéndose a ellos, sólo volvieron a reír con aún más frialdad que antes, retirándose hacia ese pequeño sector que tenían atrás, dándoles la espalda a ambos. ¿Será que no te tomaron en serio por algún motivo, los espantaste, o realmente no tienen una respuesta?
>>141060

Al ingresar a ese lugar, lo primero que ves frente a ti es un pequeño pasillo recto que deriva en una gran sala central que constaba además, de un par de escaleras, una hacia arriba, colocada en el centro a modo de caracol, y otra que iba hacia abajo de formato tradicional, en una esquina como si estuviese oculta. Parecía bastante oscura, en algún momento fue una escotilla por lo que ésta aparenta. La sala central en la que ahora te encuentras, no tenía mucha gente, tan solo se encontraba una mujer de vestimentas rojas, aparentemente extranjera o ajena a la ciudad y otras dos literalmente, copias de ella. Ninguna de las tres parece inmutarse por tu grito y ambas continúan fregando a lo largo del salón, pero pocos segundos después, escuchas como una voz ronca te contesta desde arriba, gritando también. Parece que estaba ebrio

>¡Eh, no es lo que parece... *hip*! ¡Pero, como tú quieras, da igual, sírvete! ¡No te diré como lo hice o de donde lo saqué, haz lo que quieras, da igual, da igual!

Luego de ese grito, otra mujer igual a aquellas dos sube aquellas escaleras que daban hacia un posible sótano u otro piso más abajo. Camina hacia adelante sin hacerlo de una forma que realmente destaque, más allá de que caminaba bastante lento. Trae con ella, una bandeja que lleva con una mano, cargada con un vaso de un licor rojizo hasta la mitad y a su lado, un cigarro bastante grande, más que el promedio. Tenía escritas unas palabras en él, que se irían quemando junto al mismo. La mujer deja la bandeja sobre una mesa para luego, volver a bajar esas escaleras sin hacer un ruido. Se escuchan varias voces en el piso de arriba, aunque siempre es la misma voz la que se ríe

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