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{{'2019-09-11T05:16:00.000Z' | moment 'DD/MM/YY HH:mm'}} /#/ 231505

>>231023
Gracias negrito, pero el turno es esencialmente largo por que tiene bastante diálogo, los demás tunos son un poco más cortos por eso mismo, por no poseer tanto diálogo y expresiones las cuales describir.

Perdón por tardar tanto con los turnos, pero no se preocupen, mañana es probable que roleemos casi todo el día.

>Lilim escucharía tu curiosa pregunta, de cierta forma tenías razón, pero no es que hubieran robado algo precisamente de aquel orfanato, por lo que diría en un tono sereno, mientras empezaba a caminar lentamente, en dirección al paramo desertico que yacia estoico y oscuro en el horizonte, producto de la sombria noche que se sobreponia en el ambiente, esperándote entre pasos para que la siguieras.

No es que hayan robado algo precisamente físico. Ellos poseen en sus cuerpos algo muy preciado para el clan, algo que es casi como un patrimonio histórico para nosotros, ¿Por casualidad la flor no les dió algo a tus "compañeros"?

>Preguntaría en aquel tono de ante la peligris, mientras escuchaba nuevamente tu pedido de tener un castigo, cosa que está vez no podría evitar sacarle una risita mientras te decía en un tono levemente burlón.

¿Eres masoquista acaso? Jamás observe a nadie tan empecinado por que le hicieran daño. Como ya te mencioné, no te haré nada, a mis ojos no fuiste más que alguien que solo observó sin opción, sería además, de muy poca clase el asesinar sin permiso. Por qué aunque quisiera, no podría asesinarte, no al menos fuera del territorio del clan demonio. Así que lo siento, no podré cumplir tu fetiche, ¡Shishishi!

>Exclamaria Lilim, terminando su frase con su característica y casi aguda risita, tapándose la boca con fineza, con la palma de su mano, de forma leve, mientras efectuaba tal acto. Para acto seguido, simplemente parar, solo conservando su usual y serena sonrisa mientras escuchaba tus siguientes palabras, a la cuales proseguiría respondiendo, mientras observaba que curiosamente tenías un sonrojo en tu rostro, por lo que pensaría que quizás tenía razón en lo de masoquista o que quizás le gustó la reverencia que ella efectuó, no lo tenía muy claro, pero tampoco le tomaria mucha importancia.

¿Crímenes imperdonables? Hasta donde tengo entendido, tan solo fuiste un expectante obligado, pero pareces empecinado en que te dé algún castigo... Empiezo a pensar que lo de masoquista no es una exageración mía, creo que tú eres el raro, hombre del norte, Hihihi.

>Diría entre curiosidad y una burla amistosa Lilim, mientras observaba como finalmente dejabas tu orgullo de lado y agarrabas la botella con aquel líquido que te había ofrecido anteriormente, para así poder proseguir hablando.

¿Valhalla?... Me suena a Valhell, ¿Tiene acaso algo que ver con eso? Aunque por como hablas de aquello, me hace pensar que es un lugar y no una cosa, me pregunto si sera la visión del tartaro de los hombres del norte. De todos formas, no creo que sea honorable morir a manos de una simple chica como yo, ¿No lo crees?

>Diría con algo de curiosidad la mujer de ropajes finos y piel grisácea, mientras avanzaba con paciencia por el desierto, dejando profundas pisadas en la arena mientras avanzaba, debido a sus zapatos, que eran similares a tacones.

Ya veo... Disculpa por confundir la necesidad de auto-castigo con masoquismo.

>Diría de forma curiosamente breve ante tu palabras, con algo de culpa por burlarse de ti mientras tú poseias un martirio interno por lo ocurrido semanas atras, mientras está parecía pensativa en algo mientras caminaba por la arena de aquel páramo desértico, está chasquearia los labios exactamente dos veces, mientras movía su cabeza de forma leve a cada lado, como en una pose de desaprobación, sin duda ella misma vería luego de su misión, que había detrás de todo este embrollo que generó aquel Clan y esa estúpida flor. Pero esta se vería interrumpida, por tu gesto y postura, que de cierta forma parecía bastante propio de un héroe, mientras además escuchaba tus palabras, que se asemejaban con las de un hombre bastante dolido. Lilim pensaría que eras quizás, un tanto sensible, pero no juzgaria o sonreíria justamente por aquello.

Aegon, si piensas que soy una heroína y que iré de aquí para allá haciendo actos nobles, te vas a llevar una gran decepción. Soy una buena samaritana, pero no soy precisamente una buena persona, apenas y conoces lo que soy... Pero si insistes y estás dispuesto a tomar el riesgo, no veo por qué no puedas acompañarme en todo mi viaje, mientras no seas una tortuga caminando y no andes con tus impulsos masoquistas a cada segundo, estaremos bien. Ahora sólo relájate y deja de estar tan recto que te va a agarrar una contractura.

>Diría Lilim, hablando de una forma levemente despreocupada, pero terminando al final con su usual y serena sonrisa, la cual acostumbraba a posar sobre sus labios, mientras se burlaba un poco de ti.

¿Famosa? ¿En qué sentido? La verdad, es que no veo por qué sería famosa en aquel lugar una dama como yo, me asemejó más a un monstruo que a una jovencita humana. Pero, estoy segura que debe ser un hermoso lugar, quizás algún día, pueda ir a ver qué tal está.

>Exclamaria la dama grisácea, menospreciandose un poco así misma, pero aún manteniendo su sonrisa avivada, no viendo el por que aquellas comunidades apartadas, llegarían a siquiera admirarla, sinceramente tenía rasgos que la sacaban fuera del estándar humano. Aunque tus siguientes palabras, le llamarían fuertemente la atención, en especial por la palabra "arañas", aunque se lo esperaba, desde casi el principio le había quedado casi completamente claro que ese clan fue quien planeo aquello.

¿Que si conozco a esa porquería?... Te sorprendería saber cuanto la conozco... Sin duda es una alimaña hecha y derecha, que robó patrimonios históricos de mi Clan y que manipula a gente crédula, como tú y tus compañeros. Si la ves en alguna oportunidad, no la escuches, solo atacala...

>Diría con palabras serías Lilim, palabras que mostraban algo de conocimiento hacia aquella flor de pétalos dorados, mientras acomodaba aquel paraguas que empuñaba por arriba de su cabeza, a pesar de que ya había caído la noche, casi por completo hace algunos minutos.

Abominación le queda muy grande a esa flor cobarde. No deberías desperdiciar palabras o energías en maldecirla, es demasiado confiada, en algún momento puede que se te aparezca y quiera engatusarte de nuevo...

>Diría con aparente y leve enojo, el cual desaparecería casi por completo aparentemente de las palabras de Lilim al efectuar un fugaz suspiro luego de decir aquellas últimas palabras, para acto seguido seguir escuchandote, prosiguiendo mientras decía con algo de alivio.

Es bueno escuchar eso, no me imaginaria como llegarías a derrotar a lo que se te crucén solo con palabras bonitas. Algunas cosas, simple y yanamente, no se pueden solucionar hablando. Pero dime quien es Odin, me suena a que es la Naamah de su religión... O lo que se supone que tengan, en aquellas tierras.

>Diría con calma, mientras miraba de reojo a la imponente luna, que empezaba a hacer acto de presencia desde la lejanía del páramo desértico, como así mismo, un frío bastante pronunciado, empezaba a inundar el lugar.

¡Shishishishi! No soy una dama de la entente para conjurar algo tan cursi como un caballero, no me confundas... En el clan demonio, somos más varoniles, nada de cosas de caballeros pusilánimes. En nuestro clan, se crían y hacen soldados, escuderos o guerreros, todos con diferentes jerarquías, pero ejerciendo objetivos parecidos, engrandecer a nuestro hermoso clan... Aunque si, tendrías que aprender un poco más de cultura general, Aegon.

>Diría con orgullosas palabras Lilim, pareciendo vanagloriosa de las diferencias de su clan con la Entente, a la cual claramente veía como inferior a la última ya mencionada. En tanto a ti, te seguiría escuchando, portando aquella sonrisa serena sobre su rostro, ya característica usual de ella, mientras te escuchaba. Al terminar-

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