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Ayy pobre Altair ;_;
>En el Ikaruga
Ya con todos reunidos en el hangar o por lo menos con la mayoría en el mismo, soldados comienzan a llegar, muchos de ellos montando las naves y con armas en mano, el movimiento y el flujo militar fue constante. Lo que ocasiono que Ornstein y Montserrat no vieran a Atsushi y a Prinz ya que estos estaban cubiertos por soldados. Segundos mas tarde llega Pyra, C.C y Littorio, aunque C.C subió de una buena vez al Avalon porque tiene que cambiarse de ropa, no planea ir con sus prendas habituales si no con algo mucho mas acorde a la situación. Por la rapidez en la cual subió, no saludo ni tampoco vio a la mareada Altair.

Segundos mas tarde, llega Cornelia con Duncan implicando ;_; ya que la Britannia la fue a buscar, aunque estos no son los únicos que vienen junto a la diosa de la victoria, también viene Eda. Aunque ella no va al viaje como tal. Cornelia y Eda son las que se percatan de la situación con Altair y Prinz, aunque con esta última Eda alza la mano, mientras come su respectivo chicle de fresa y se sube los lentes, presionando el puente de los mismos.

Eda: ¡¿Qué hay muñeca?! Andabas mas desaparecida que el espíritu santo cuando le dijeron que embarazo a la virgen Maria. Que hablando de vírgenes, ¿Y a esta qué le paso? kek, perdón ¿Se le subió el azúcar? Anda, dale esto.

Saca un cigarro de uno de sus bolsillos. Lo enciende y se lo extiende a Prinz. Mira de reojo a Altair.

Eda: ¿Y ese es tu novio? También le puedes dar una calada, muñeco. No muerdo, soy Eda, la monja, y no, "La monja" no es mi apellido hehe...

Cornelia: Si sigues así no les vas a dar ni los buenos días hasta que hayan pasado 10 años...

Eda: Cuanto veneno. ¡Tsss! Que hablando de veneno, cuidado por ahí. He escuchado de una cobra muy peligrosa... Y no es la Taka Taka, es morada. https://www.youtube.com/watch?v=sMYhA_14ueI

Cornelia: Eda... al punto, que no tenemos todo el día, el tiempo es importante... Y Prinz, deja que te ayude con Altair...

En caso de que la Nishonomiya haya aceptado, Cornelia es ahora que le mantiene de pie, ayudando a mantenerse en esa posición. Eda guarda el cigarro en caso de que no se hayan mostrado interesados en pegarle una buena calada. De uno de sus bolsillos saca una botella la cual tiene la forma de la virgen Maria.

Eda: En nombre de Dios padre, creador del cielo, la tierra y las malteadas de chocolat-

Cornelia frunce el ceño y se le queda mirando a Eda. Los Britannia son creyentes, aceptan bromas, pero que se metan con sus creencias insistentemente y de manera constante es molesto. Eda entiende el mensaje y toma algo de aire. Se levanta los anteojos y vuelve a hablar. Abre el agua bendita, pone el dedo en la boquilla, pero deja un pequeño espacio para que el agua pueda salir.

Eda: Vamos de nuevo. Cierren la boca y a los no creyentes, pues se joden igual. Aquí vamos. ¡Ah! Por cierto Prinz, andas mas alta y mas... grande. En fin, ahora haré a lo que me trajeron, vamos que me andan descontando horas.

Eda abre la boca y entre tanto movimiento, una placa de color azul cae al suelo. La monja se inclina a recogerla como si no fuera nada. Omite ese pequeño detalle, como si nada hubiera pasado. Sin mas, comienza a bendecir a todos los presentes... y con ello, monjadolos en el transcurso, echando agua por la cara o el cuerpo, sin importar si los conoce o no. Eda es una monja fuera de serie y eso se da a entender cuando te percatas que tiene una fonda para su arma bajo el brazo... y que su arma igual es demasiado exótica.

A Prinz, Cornelia y a Atsushi les salpico agua en el pecho, a Montserrat y a Ornstein les salpico en la cara, a Pyra y Littorio también kek... Cuando llegaron Poe y Violet, les salpico agua en el pecho, o al menos ahí apunto, porque les cayó en el cuello. Todo eso lo hizo mientras decía lo siguiente:

Padre mío. Te pongo en tu santa presencia a (el nombre de la persona) Para que seas tú señor, llenándola de tu amor, de tu paz, de tu santidad y sobre todo padre mío de tu gozo.

Te pido que seas tú señor supliendo sus necesidades, seas tú prosperándolo y trae abundancia a su vida, que no le falta que comer, ni vestir, ni un techo en donde quedarse.

Desata tu bendición sobre él, y que él pueda testificar de que tú eres su único proveedor.

Señor se tú liberando su vida de toda atadura y toda maldición que no deja que sea feliz, y que tus bendiciones vengan a su vida.

En el nombre de Jesús

Amén.

Shi Tsu termina por salir del Avalon, ya con las prendas cambiadas, lleva una túnica, sombra por debajo de los ojos y en realidad parece ser perteneciente a un grupo religioso. Eda se acerca a ella y le echa agua también. Shi Tsu se tapa la cara poniendo su antebrazo al frente de la cara.

Shi Tsu: Gracias, Eda...

Eda: Gracias a ti por darme ese whisky. En fin, me voy. ¡Cuiden su culo! Me trae algo bonito a donde sea que vayan o lo que vayan a hacer. Bendiciones, besos y abrazos y esas cosas. ¡Adios Prinzcesa!

Guarda el agua bendita y enciende un cigarro. En caso que no le hayan dicho nada, Eda se va agitando la mano de un lado a otro. Shi Tsu pide que se reúnan de ella y comienza a explicar para que los citó ahí. Cornelia aún tiene agarrada a Altair implicando, kek, intenta hacer que se sienta mejor, le anda echando aire.

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