Resultados de búsqueda undefined

Anónimo {{'2020-05-08T13:58:00.000Z' | moment 'DD/MM/YY HH:mm'}} /#/ 370465

>>370462
La chica asintió al ver que eras capaz de beber a su ritmo, así que te sirvió otra copa y otra mas para ella, se la bebió de un trago y te espero, lo pensaste un poco, no querías embriagarte tan rápido pero aun así la bebiste.
- Eres bueno bebiendo - Te felicito y sirvió otra ronda - Pero puedo ganar - Puso la botella en el centro de la mesa, de la nada quiso iniciar una competencia, tragaste saliva sabiendo que no podía evitarse. Fue una tras otra, llego el momento en que simplemente decidiste jugar con la taza en lugar de beberla, el alcohol aun no te afectaba pero ella entre su espíritu de combate y su gusto por la bebida ya se notaba afectada, levanto la ultima copa señalando su victoria y bebía antes de dejarse caer sobre el tatami embriagada, podías incluso escuchar como roncaba, que se expusiera de esa forma frente a un hombre, siendo tan linda en tu mundo hubiese tenido muchos problemas, te pusiste de pie para ir al baño, al regresar viste que tenia los ojos abiertos, miraba fijamente al techo - Quiero ir a mi habitación - Estiro la mano pidiendo ayuda, esta era una de las facetas de la miko que se podía ver en muy pocas ocasiones, bueno, era la primera vez que la veías fuera de los pocos diálogos que ZUN agregaba a sus juegos, le ofreciste la mano para guiarla hasta su futon para que durmiera un poco, la acostaste e intentaste cubrir pero ella se quito la sabana de encima, te miro - ¿Te gusta estar aquí? - Pregunto de la nada, eras un extraño en el Gensokyo, habías dejado todo atrás pero no querías arrepentirte, no si habías llegado al lugar donde tantos habían deseado estar, asentiste - ¿Que es lo que te gusta de estar aquí? - Su curiosidad comenzaba a mostrarse, aunque tu conocías su pasado gracias a los juegos ella no sabia nada de ti, jamas mencionaste si quiera que este mundo fue creado por un alcohólico, sentías que si lo hacías toda la fantasía que rodeaba al mundo desaparecería, no estabas seguro de la respuesta que esperaba pero si que respuesta darías, lo que mas te gustaba del Gensokyo era Reimu.
Hubo silencio - ¿Reimu? ¿Yo? - Simplemente dijiste lo indicado, Reimu era alguien que conocías desde hace un tiempo, en tu mundo es bien conocida por los humanos y que tu mayor sueño era poder conocerla y expresar, de manera directa, lo mucho que la amabas ¿Acaso era el alcohol lo que hablaba por ti? Al menos te daba valor, no te fuiste por las ramas, lo dijiste directamente esperando que todo saliera bien - Amar como... ¿Amar? - Le pediste un beso, aquel rubor en sus mejías ya no era solo por estar ebria, en ese mundo ya no eras ese sujeto que perdía el tiempo en IBs, con un mal trabajo o desempleado, este era un reinicio de tu vida así que podías ser valiente como nunca te habías atrevido, te inclinaste para acercarte a sus labios, la miko trago saliva pero curiosa por lo que estaba ocurriendo dejo que pasara; Sus labios eran tan suaves, el sabor al sake en su saliva, fuiste cariñoso al tomar su beso, le enseñabas de que forma hacerlo - ¿Eso esta bien? - Que si lo estaba, sentías tu corazón latir acelerado ¿Podrías llegar mas lejos? ¿Te lo permitiría? La situación era demasiado buena, te acercaste una vez mas para besarla, esta vez de una manera mas adulta, usando tu lengua, Reimu apretó los ojos congelada, te dejo hacerlo queriendo conocer un poco mas, dirigiste tu mano hacia su delgada cintura para acariciarla un poco, al notar que su reacción era buena deslizaste tu mano sobre su suave abdomen hasta lograr sentir las vendas que cubrían sus pequeños senos, la distraías con el beso mientras apartabas las vendas y eras capaz de sentir su cálida piel, su aroma a frutos secos te calentaba aun mas mientras llegabas a sus pezones, sin perder tiempo te montaste en ella, podías notar como se le dificultaba respirar, estabas acabando con ella y ver a una chica tan fuerte e independiente en un estado tan vulnerable te emocionaba, bajaste hacia su cuello sintiendo su aroma y besando su piel, sentías como su cuerpo se tensaba hacia la sensación, tomaste su mano y la dirigiste a tu yukata para que sintiera tu erección, aquel raro objeto que se escondía debajo de tu ropa llamo su atención, lo toco un par de veces con el indice y luego apretó, aunque era sobre la ropa sentir sus manos te estremecía.

Resultados de la búsqueda: